Los elementos indispensables para mejorar la accesibilidad en las fincas de vecinos

Los elementos indispensables para mejorar la accesibilidad en las fincas de vecinos
General

La accesibilidad en los edificios de viviendas es clave para la calidad de vida de todos los vecinos. Es importante adaptar todos los elementos comunes para que cualquier vecino con dificultades de movilidad pueda acceder con facilidad a la calle.

Las repercusiones de la falta de accesibilidad en una vivienda que sufren los afectados permanecen en segundo plano en muchos ámbitos. Es por ello que, a día de hoy, muchas personas son prácticamente prisioneras en sus propias casas, lo que no facilita para nada el desarrollo normal de sus vidas, además de afectarle a su salud. 

Accesibilidad a la vivienda en comunidades de vecinos

A día de hoy es obligatorio instalar y cumplir con la accesibilidad universal para garantizar la autonomía y la seguridad de estas personas son necesidades especiales, pero en muchos casos desgraciadamente sus vecinos no lo cumplen.

¿Cómo se puede mejorar la accesibilidad en las viviendas?

Hay que revisar la anchura de las puertas de acceso de toda la comunidad y de la vivienda. Las puertas han de tener un mínimo de 80 cm de ancho para que una silla de ruedas pueda entrar sin problemas.

Los agarraderos, botones del ascensor y cualquier tipo de mobiliario de la comunidad debe situarse a una distancia adecuada para permitir el fácil acceso.

Los suelos deberán ser antideslizantes y evitar en la medida de lo posible los obstáculos.

Ascensor: Es el elemento principal a la hora de adaptar una comunidad y debe ser capaz de comunicar todas las zonas comunes entre ellas: entrada principal, rellanos de los portales y el garaje. En caso de que sea imposible conseguir que todas las zonas se conecten con un solo ascensor puede optarse por una plataforma salvaescaleras o por incluir una silla salvaescaleras.

Evitar rampas con demasiada pendiente: Un problema clásico al que se enfrentan las personas con problemas de movilidad reducida es que las rampas de acceso estén construidas sin pensar en su uso cotidiano. Se debe evitar instalar rampas demasiado inclinadas o incluir una plataforma salvaescaleras y evitar el uso de rampas.

Barandillas de seguridad: Siempre habrá zonas más delicadas de transitar que pueden requerir de un punto de seguridad adicional, como una barandilla. Las barandillas no sólo ayudan a las personas con necesidades especiales sino a los mayores y embarazadas.

Espacio de maniobra: Además de adaptar los elementos físicos de la comunidad, hay que contar con que el espacio de maniobra de una persona con movilidad reducida generalmente es mayor. La comunidad debe contar con unas zonas comunes espaciosas, que permitan moverse con libertad a todas las personas.

Los suelos deberán ser antideslizantes y evitar en la medida de lo posible los obstáculos.

Es importante mantener y aumentar la conciencia social sobre la accesibilidad universal en todo tipo de espacios, de esta manera facilitamos la vida de aquellas personas con movilidad reducida y de su entorno.

En Lv3 llevamos más de 25 años ayudando a mejorar la accesibilidad en todo tipo de espacios. Nuestras plataformas salvaescaleras ofrecen la solución de accesibilidad para escaleras de tramos rectos y curvos, tanto en el interior como en el exterior de los edificios. Confía en LV3,  los expertos en accesibilidad.